Ibiza es conocida por sus famosos mercadillos hippies, como el de Las Dalias y el de Punta Arabí. Pero más allá de estas dos citas y de los mercadillos que se organizan durante el verano en otros lugares turísticos de la isla, en Sant Jordi aguarda el rastro más auténtico de todos. Sigue leyendo este artículo y descubre por qué tienes que reservarte una mañana de sábado para acercarte a este pueblo situado a menos de 5 minutos en coche de Ibiza Sun Apartments.

Mercacillo de San Jordi de Ses Salines

En el interior de lo que era el antiguo hipódromo de Ibiza se celebra cada sábado el mercado de segunda mano por excelencia de Ibiza. En sus numerosos puestos encontrarás ropa, complementos, vajillas, discos, muebles, antiguallas, libros, rarezas y objetos varios… El mercadillo de Sant Jordi se caracteriza por su ambiente desenfadado porque cualquiera puede poner su puesto con tan sólo reservar previamente. Por eso su público es muy diverso y engloba tanto a locales, como a viajeros, nuevos residentes, extranjeros, cazatesoros, decoradores...

Mercadillo de Sant Jordi © Sergio Torres / Mercadillo de Sant Jordi

¿qué más puedo hacer en Sant Jordi de Ses Salines?

Este pequeño pueblo a medio camino entre Ibiza y el aeropuerto tiene un marcado ambiente local. Cuenta con una amplia oferta de restaurantes, desde las hamburguesas de Can Sala y Vinyl Burger, hasta la cocina casera de Rasca Lobos o las pizzas de Es Tancó. Así que después de tu paseo por el mercadillo de Sant Jordi puede ser una buena idea quedarse a comer en el pueblo. Además, la iglesia de Sant Jordi se diferencia de las restantes de la isla porque ha conservado un remate almenado que acentúa su carácter defensivo..

Iglesia de Sant Jordi de Ses Salines. © Illesbalears.travel

¿y por los alrededores de Sant Jordi?

Después de la comida, lo apetecible es echarse la siesta o darse un chapuzón refrescante, ¿no? Puedes regresar a Ibiza Sun Apartments para disfrutar de ambas opciones o poner rumbo a las cercanas playas de Ses Salines y Es Cavallet, ambas a escasos minutos en coche de Sant Jordi.

Foto de apertura: Flickr